Día internacional de juventud 2024
12 de agosto
En México hay 16.4 millones de jóvenes en pobreza, exclusión y precariedad laboral, lo cual representa a más de la mitad de las personas jóvenes en el país. 5.1 millones de jóvenes están fuera de la escuela y sin trabajo, de ellas, son 3.7 millones de personas jóvenes excluidas que no pueden buscar trabajo por realizar labores no remuneradas de cuidado en el hogar: 92% son mujeres. También hay 8.2 millones de jóvenes están en trabajos precarios, lo cual implica que carecen de salario suficiente o seguridad social y, en muchos casos de ambos. Además, hay 3.1 millones de estudiantes en pobreza por ingresos a nivel nacional, en riesgo de caer en esas situaciones de exclusión o precariedad.
Estos datos dejan claro el largo camino por recorrer para garantizar los derechos de las personas jóvenes.
Desde la Alianza Jóvenes con Trabajo Digno reiteramos nuestro compromiso con los derechos de las personas jóvenes y en particular, de jóvenes oportunidad, quienes tiene entre 15 y 29 años y son resilientes, creativas y con capacidad de resolución, que vienen de contextos adversos y que, al tener una oportunidad de inclusión social, educativa y de trabajo en condiciones dignas, aportan al crecimiento económico e inician un proceso de movilidad social.
En este Día Internacional de la Juventud, en que también celebramos 5 años de la Alianza, convocamos a los gobiernos, las empresas y en conjunto, a la sociedad civil, a impulsar políticas públicas y acciones efectivas que abran espacios laborales, educativos, culturales y políticos que favorezcan el desarrollo de todo el potencial de las personas jóvenes oportunidad.
Reiteramos nuestras propuestas a gobiernos, empresas y sus instancias de representación, instituciones educativas, y organizaciones civiles, para que promueva la permanencia educativa, el aprendizaje continuo, el desarrollo de habilidades técnicas y socioemocionales, la capacitación en el trabajo y la inserción laboral para que millones de jóvenes que están sin trabajo y fuera de la escuela, o que tienen trabajos precarios, accedan a trabajos dignos, garantizando, de esta manera sus derechos humanos.
Presentamos cuatro propuestas para la construcción de políticas públicas que garanticen trabajo digno a jóvenes oportunidad y hacemos un llamado para que sean consideradas con la seriedad y urgencia que el tema amerita.
Fortalecer el programa Jóvenes Construyendo el Futuro (JCF)
El programa JCF visibiliza y atiende una problemática urgente, pero aún requiere fortalecerse. Para ello, proponemos las siguientes acciones:
Priorizar a jóvenes con rezago educativo, que no concluyeron el bachillerato o la secundaria y que presenten otras barreras de empleabilidad.
Atender las zonas donde hay más jóvenes fuera de la escuela y el trabajo, en las ciudades del centro y el norte del país.
Promover y facilitar la certificación de aprendizajes y habilidades ante CONOCER u otras instancias
Involucrar a los institutos públicos de capacitación y organizaciones de la sociedad civil (OSC) especialistas en juventud y empleabilidad como "co-tutores" en la formación de habilidades técnicas, socioemocionales y digitales.
Cuente con un sistema de monitoreo y evaluación para supervisar a los centros de trabajo, sí estén registrados, tengan personal y puedan ofrecer capacitación relevante para puestos de trabajo disponibles en cada lugar.
Activar las mesas de diálogo con los organismos empresariales para garantizar el compromiso de su participación activa e invitar a organizaciones civiles que hayan mostrado resultados en la operación del programa en años anteriores.
Estamos convencidos y convencidas de que la adopción de esta serie de recomendaciones puede contribuir a generar mejores resultados en el programa.
Revalorizar las instituciones de educación y capacitación de nivel medio superior
El acceso y calidad de la educación media superior en México presenta retos importantes para el desarrollo pleno de las personas jóvenes. En este contexto, proponemos:
Revalorizar los subsistemas de educación técnica y tecnológica con inversión para mejorar las instituciones, entre ellas el ICAT, CECATI, CONALEP, CECYT, así como la calidad y pertinencia de su oferta de formación.
Vincular los subsistemas de educación técnica y tecnológica con programas de empleabilidad en el que participen instituciones educativas, empresas y OSC expertas.
Crear un modelo de segunda oportunidad que sea flexible y adecuado a jóvenes oportunidad, que incluya formación en habilidades socioemocionales y capacitación técnica para la inserción laboral.
Fortalecer la educación dual mediante una figura de ‘vinculador laboral’ en los centros de educación tecnológica y considerar un esquema para jóvenes no escolarizados con el apoyo de OSC.
Actualizar los mecanismos de certificación de competencias a fin de aportar valor curricular a los conocimientos y habilidades desarrollados por jóvenes oportunidad en sus experiencias prácticas.
Crear un Sistema nacional de cuidados para impulsar la empleabilidad de mujeres jóvenes oportunidad
Las mujeres jóvenes enfrentan barreras adicionales para acceder al trabajo digno en comparación con sus contrapartes hombres.
Por ello, resulta urgente construir un Sistema nacional de cuidados que:
Desvincule los servicios de cuidado infantil de la seguridad social, ya que su acceso está limitado a personas con empleos formales.
Asegure su presupuesto e infraestructura que permitan la diversificación de los servicios de cuidado así como promover un modelo de gestión mixta en el cual participen servicios públicos, privados, sociales o mixtos.
Establezca estándares de atención en los servicios de cuidado infantil respecto a la nutrición, así como programas de desarrollo infantil temprano.
Ofrezca opciones educativas de tiempo completo para niñas, niños y adolescentes en edad escolar que permitan la inclusión de mujeres jóvenes cuidadoras en el mercado laboral formal.
El Sistema nacional de cuidados representa una oportunidad para promover la inclusión económica de mujeres jóvenes oportunidad que actualmente no tienen la posibilidad de buscar un empleo al tener responsabilidades –sin remuneración– en el hogar.
Impulsar una política laboral que garantice trabajo digno para jóvenes oportunidad
La Reforma Laboral de 2019 es un avance importante en las condiciones laborales en México, junto con el notable incremento al salario mínimo desde ese año. Sin embargo, aún persisten millones de jóvenes oportunidad, quienes carecen de salario suficiente, protección social, entre otros derechos laborales de ley. Por ello, proponemos:
Incentivar a las empresas comprometidas con jóvenes oportunidad, destacando el impacto positivo que sus acciones tienen en las personas trabajadoras y la economía.
Reforzar la supervisión de centros de trabajo para vigilar, denunciar y sancionar a empresas que violen derechos laborales.
Recuperar espacios de colaboración y corresponsabilidad a fin de fortalecer vínculos entre el gobierno, el sector privado y la sociedad civil.
Implementar modelos de Formación Integral para el Trabajo (FIT) en alianza con empresas, que incluyan habilidades técnicas y socioemocionales, así como un componente de vinculación laboral.
Promover el conocimiento de los derechos laborales, particularmente entre y para las personas jóvenes.
Impulsar el diálogo social entre los actores del sector público, privado y social es fundamental para mejorar las condiciones laborales de las personas trabajadoras en México, principalmente de jóvenes oportunidad, quienes enfrentan mayores barreras de acceso al trabajo digno.
Es por eso que enfatizamos activar la mesa de diálogo con los organismos empresariales con respecto al programa JCF para garantizar el compromiso de su participación activa e invitar a organizaciones civiles que hayan mostrado resultados en la operación del programa en años anteriores.
La Alianza Jóvenes con Trabajo Digno lleva cinco años construyendo, de manera colaborativa, esta agenda de propuestas. Y seguiremos insistiendo y proponiendo a tomadores de decisión mejores políticas para que las personas puedan exigir su derecho al trabajo digno.
A los líderes de opinión, medios de comunicación y sociedad, les decimos: no son ninis, ni vagos, ni 'generación de cristal'. Son y somos jóvenes oportunidad.
Exhortamos a la presidenta electa y al equipo de transición a escuchar este llamado a la acción: no podemos esperar un sexenio más para que jóvenes oportunidad ejerzan plenamente sus derechos. El tiempo de actuar y comprometerse con jóvenes es ahora: las múltiples e interconectadas crisis les afectarán desproporcionadamente, y estas claves son punta de lanza para una prosperidad compartida.
Si bien son propuestas y una agenda ambiciosa, no es imposible. Requerirá de un esfuerzo colectivo y desde la Alianza estamos convencidos de que trabajando en conjunto y sumando esfuerzos podemos contribuir a la construcción de mejores políticas públicas en beneficios de los 16,4 millones de jóvenes oportunidad en nuestro país.
Para más información: https://www.jovenescontrabajodigno.mx/
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