Las organizaciones civiles que conforman la Alianza Jóvenes con Trabajo Digno hacen un
llamado a tomadores de decisión para no cerrar las puertas del empleo a los jóvenes, ya que
son ellos los que han sido despedidos en mayor medida en el contexto de la actual crisis
económica y sanitaria derivada del COVID-19.
Si antes de la pandemia los jóvenes padecían mayor desempleo y precariedad laboral, esos
dos problemas se han profundizado. Aunque la Alianza reconoce el programa Jóvenes
Construyendo el Futuro como un paso en la dirección correcta, éste no es de ninguna forma
suficiente para crear al menos 1 millón 200,000 empleos al año, que son los que
aproximadamente se necesitan.
Frente a la actual emergencia, la Alianza 1) apoya el Ingreso vital temporal que han promovido una serie de organizaciones de la sociedad civil y legisladores; 2) se suma a la propuesta de un subsidio parcial a las empresas para evitar despidos y 3) propone enfocar mejor el programa Jóvenes Construyendo el Futuro para que llegue a jóvenes con mayores obstáculos.
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